Seleccionar página
Festival Jazz Madrid 2024 – Villanos del Jazz

Festival Jazz Madrid 2024 – Villanos del Jazz

FESTIVAL JAZZ MADRID 2024

VILLANOS DEL JAZZ

19

Diciembre, 2024

Un año más, el Festival Villanos del Jazz ha unido fuerzas con el Ayuntamiento de Madrid para enriquecer la programación del Festival Internacional Jazz Madrid, ofreciendo una propuesta diversa que combina a grandes figuras del género con jóvenes talentos emergentes. Este esfuerzo colectivo, respaldado también por colaboradores como el Festival de Jazz de Ciudad Lineal, 21 Distritos, Jazz con Sabor a Club y Jazz Círculo, ha convertido al otoño madrileño (septiembre-diciembre) en una temporada marcada no solo por los tonos dorados de sus parques, sino también por la vibrante música que resuena en sus calles y clubes. Espacios emblemáticos como la Sala Villanos, el Teatro Pavón y el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa han sido, una vez más, el epicentro donde los artistas invitados por Villanos del Jazz han desplegado todo su talento y creatividad. De los más de 150 conciertos que han inundado la ciudad, desde In&OutJazz hemos tenido el privilegio de asistir a una treintena de ellos, disfrutando de una experiencia única que refleja la riqueza y diversidad de la escena jazzística actual en Madrid.

El primero de ellos, Gastón Joya que armó la gozadera a ritmo de son cubano y ha puesto a bailar a todo el público. Le acompañaban músicos de la talla de Naíma Acuña, una baterista joven que está revolucionando la forma de tocar y concebir su instrumento, Ariel Brínguez, saxofonista tenor exquisito y profundo, el pianista Esteban Puebla, la flautista Arianna Mack, el prestigioso percusionista Yaroldy Abreu y más invitados. Días después pudimos disfrutar de Sungazer, un cuarteto cuyo núcleo es la amistad entre el bajista Adam Neely y el baterista Shawn Crowder, ambos compositores y divulgadores musicales de primer nivel que han logrado fusionar la electrónica y el jazz-progresivo de una manera que llega a todos los públicos y se siente natural y orgánica. Sus acompañantes son Jake Silverman a las teclas y Jared Yee al saxo tenor. Melissa Aldana volvió a triunfar en Madrid, con composiciones que nos derritieron a todos. Su joven cuarteto formado por Pablo Menares al contrabajo, Glenn Zaleski al piano y Kush Abadey a la batería es de obligatoria escucha para el amante del jazz fresco. El jazz nacional visitó el Café Central al son de tres de sus mayores exponentes. El CMS Trío formado por Perico Sambeat, Javier Colina y Marc Miralta brindó una velada de lo más preciosa y no se olvidaron sus integrantes de recordar a las víctimas de la Dana de Valencia, por las que también desde la revista mostramos nuestras más sinceras condolencias. Entre pase y pase nos concedieron una entrevista de lo más interesante. La sugerente música de la pianista Kris Davis en su proyecto Diatom Ribbons dejó al Condeduque boquiabierto por varias razones que cuenta en la entrevista que nos condeció. Otro saxofonista, un tanto más veterano, que causó revuelo es Donny McCaslin. El minimalismo, los ambientes texturales, los pedales de efectos y el llanto son solo algunos de los elementos distintivos del proyecto que pudimos apreciar. El 7 de noviembre —y no fue el único día que el aficionado de jazz tuvo que elegir entre varios conciertos—, pudimos asistir de forma encadenada al tributo Remembering Ray Brown en manos de las estrellas Christian McBride, Benny Green y Gregory Hutchinson, en el Fernán Gómez, y al proyecto de Chief Adjuah Formerly Christian Scott. El swing corría por las venas del trío de veteranos; la revolución amorosa y pacífica fue el hilo conductor del discurso verbal y musical del espectáculo de Scott, quien se vio acompañado por auténticos semidioses jovencitos que están conquistando la escena como Cecil Alexander a la guitarra y Ele Howell a la batería entre otros. Ese día la ciudad ardió. Al día siguiente, el trío formado por el afamado percusionista Pedrito Martínez, el baterista Antonio Sánchez y el bajista Micahel League, presentaron por primera vez en vivo su proyecto Elipsis, proponiendo una nueva forma de comunicarse y de improvisar juntos en el escenario. El jovencísimo cuarteto de Frantzes Elzaurdia llenó la sala Vesta de una audiencia que pudo disfrutar de un sonido nuevo y fresco custodiado por su cuarteto. Un día después, el maestro y leyenda Joe Lovano no solo nos dejó fascinados musicalmente, sino que tuvo el detalle de concedernos también una entrevista dirigida por el mismo Elzaurdia donde nos explicó muchas cuestiones interesantes. Horas después sería el aclamado guitarrista y compositor Pat Metheny quien llenaría el auditorio nacional. Su espectáculo en solitario nos dejó boquiabiertos, sacando a pasear decenas de guitarras de todo tipo y color, haciendo gala de todo su repertorio e intercalando la música con breves historias de su vida. Esa misma semana pasaron por la capital Avishai Cohen y su cuarteto. El Teatro Pavón experimentó nostalgia, delicadeza, profundidad, fuerza y desgarro a través de la música de este conjunto israelí que carga en su conciencia y corazón la coyuntura de su país. Por si fuera poco, al día siguiente fue el turno de Crosscurrents Trio, inicialmente formado por los gurús Dave Holland, Chris Potter y Zakir Hussain, por quien mostramos nuestras condolencias ya que se encontraba enfermo en el momento de la actuación y poco tiempo después fallecería vistiendo de luto al mundo de la música. En su lugar acudió el joven Marcus Gilmore, a quien también tuvimos que transmitir nuestro pésame debido al fallecimiento de su abuelo, el querido-y-admirado-por-todos Roy Haynes. Con todo, el trío de genios viajó a través de texturas, ambientes y composiciones originales que embaucaron a todo el público. Ese fin de semana estaría protagonizado por el interesante saxofonista Tivon Pennicot, el virtuoso guitarrista John Scofield y por nuestro querido pianista español Alex Conde. Uno en la sala Tempo y a cuarteto, otro en el Fernán Gómez y en solitario, como su amigo Metheny a comienzos de la misma semana, y el último en la Villanos y a trío (Miquel Álvarez al contrabajo y Michael Olivera a la batería), arrancaron aplausos del todo merecidos. Butcher Brown fue la banda encargada de volver a incendiar la misma sala, consiguiendo que todo el público cantase y bailase sin cesar. El Fernán Gómez acogió nuevamente esa semana a otro gran nombre: Kurt Rosenwinkel. Respaldado por su trío nos dejó a todos sin respiración con sus líneas explosivas y sus arreglos de standards poco conocidos. Una semana después, cerrando el mes de noviembre y abriendo el de diciembre, la sala villanos albergó dos de los mejores conciertos de la edición. Nduduzo Makhathini y su trío (esta vez con Lukmil Pérez a la batería) propusieron una nueva forma de interactuar, de improvisar y de hacer Free (liberarse de las cadenas de concepciones arcaicas). Al día siguiente, el también-pianista David Sancho, acompañado por todo un elenco de músicos españoles entre los que destacan sus fieles amigos Borja Barrueta, Jesús Caparrós y su pareja Marta Mansilla, presentó su último trabajo Mind in Progress recibiendo un éxito palpitante entre la audiencia. También él nos pudo conceder una entrevista genial ese mismo día.

By José Cabello 

Enero 10, 2025

Canarias Jazz Showroom 2024 (Parte II) – Interviews: Alba Aceytuno-Christian Cabrera-Cristopher Pérez

Canarias Jazz Showroom 2024 (Parte II) – Interviews: Alba Aceytuno-Christian Cabrera-Cristopher Pérez

CANARIAS JAZZ SHOWROOM 2024 (parte II)

Entrevistas

ALBA ACEYTUNO

CHRISTIAN CABRERA

CRISTOPHER PÉREZ

09

Enero, 2025

By: José Cabello Llano

Photos: Concesión de los artistas

 

Podcast de las entrevistas completas a continuación 

 

Gracias a la invitación de Kike Perdomo y la asociación de músicos de Canarias hemos tenido el auténtico privilegio de poder asistir a Canarias Jazz Showroom 2024. Ha sido un fin de semana intenso, de experiencias musicales, humanas, gastronómicas y de toda índole. La acogida ha sido dulce y cálida. La música conmovedora y ciertamente sugerente. El festival ha concedido tres premios importantes a Mejor solista , Mejor compositor y Mejor intérprete. Desde In&OutJazz, como siempre, hemos visto en estos jóvenes artistas el reflejo de algo que todo el mundo necesita: frescura, creatividad, honestidad, búsqueda y apertura.

Estos jóvenes son, en orden de premios: Alba Gil Aceytuno (saxofonista alto), Christian Cabrera (guitarrista) y Cristopher Pérez (saxofonista tenor). Cada uno de ellos ha tenido el detalle de concedernos una breve entrevista que os dejamos a continuación tanto en formato de podcast como en formato escrito. Esperemos que disfrutéis tanto como nosotros. ¡Adelante!

In&OutJazz: Es un placer poder acogerte en In&OutJazz y poder saludarte y hacerte una brevísima entrevista. Somos unos cuantos colaboradores que nos encanta trabajar para dar voz a los artistas que estáis ahí empujando en lo artístico-musical y proponiendo cosas nuevas y cosas frescas. Así que nada… Y la verdad es que tu paso por Canarias Jazz Showroom no nos ha dejado indiferentes, pero no solo a nosotros, a mucha gente. O sea que nada, podemos decir que las nuevas promesas en España estáis apuntando alto. Bueno, y para apuntar alto es necesario haber bebido de alguna fuente. Yo creo que sería interesante que nos contases un poquito cómo llegas tú a la música, cuál es tu experiencia, en qué momento estableces una relación con ella y cuáles crees que son tus mayores influencias a día de hoy. Allá que va!

Alba Gil Aceytuno: Primero que nada, encantadísima. Es un placer estar aquí también y haberles conocido ahí en Tenerife. Y nada, de verdad que es un placer y agradecerles y darles la enhorabuena por el trabajo que hacen.

Alegría.

Es muy amplia la pregunta, pues si vamos desde el principio-principio, por mis padres que me inculcaron el amor por la música, siempre con un montón de discos diferentes en el coche y en casa, yendo a muchos conciertos, a todos los festivales que había por aquí, y a toda la música que apareciera como el festival de jazz, WOMAD, pues todo lo que había aquí en Las Palmas. Después fui la que tiró del carro para meterme en clase y fue el saxofón. Mi tía tenía uno que no estaba usando y era un buen instrumento.

¡Qué guapo!

Desde muy pequeñita uno de los grupos que escuchaba con mis padres fue Extremoduro. Recuerdo que había un solo de una canción de Extremoduro que me flipaba.

¡Qué bueno!

Buscando una luna de saxo alto, además, que no es tan común verlo en estilos como el Rock.

Total.

Me atrapó, fue como, “bueno, perfecto, me cuadra, es todo genial”. Así que empecé a tocarlo. Empecé tocando muy enfocada en el clásico porque después me pasé al conservatorio y estuve muy, muy enfocada en el clásico que, pese a ser bastante raro, el saxofón clásico me gustaba un montón. Pero ya a los 15-16 años empecé a hacer amigos músicos que estaban introduciéndose en la improvisación y en el jazz. En todos estos estilos, más libres. Empecé a tocar con ellos, a explorar con ellos. Ellos me enseñaron un montón de música. Creamos un grupo que se llama Zumurrud. Tenemos un disco grabado. No estamos muy activos ahora, pero ahí seguimos. Somos colegas, así que el grupo se mantiene.

¡Olé, olé!

Me enseñaron a Charles Mingus. A John Coltrane ya lo había descubierto porque mi madre tenía un disco. Pero sobre todo a Mingus, a Ornette Coleman, así como la parte un poquito más punky del jazz y mil otros músicos. Escuchábamos juntos y nos inspiraba para seguir tocando. Después fui a Holanda a hacer el bachelor ahí, la carrera, y allí encontré otra gente que me inspiró y tanta música. Allí fui a todos los conciertos que pude y, por supuesto, la gente, músicos de todo el mundo. Visiones distintas. Fue súper inspirador también.

¡Qué guapo, qué guapo! Muy bien, muy bien. ¡Qué alegría, qué alegría! Tremendo recorrido, ¿no? La verdad es que…

Sí.

Oye, ¿cómo ha sido tu paso por Canarias Jazz Showroom? ¿Qué es lo que más te llevas de tu experiencia allí? Que, bueno, jugabas en casa, ¿no? Pero…

Es tocar en casa porque al final es Canarias, pero bueno, tenemos el mar de por medio…

Eso es verdad.

Nos movemos bastante porque son 20 minutos en avión o una horita en barco. Pero al final, quieras que no, pues, no estamos tan conectados como tener una carretera en medio. Entonces, para mí, ir a Tenerife ya es ir a tocar fuera. Aunque últimamente lo hago…, estos últimos años lo hago un montón. Fue un fin de semana súper, súper bonito. Yo salí de allí muy, muy inspirada. Lo primero, pues, el concierto con Cristian Cabrera, que la verdad es que estoy disfrutando mucho tocar su música. Es música exigente, complicada, que te hace ponerte las pilas y yo venía echando un poco en falta a eso.

¡Qué bueno!

Es una música con la que conecto mucho. Así, ritmos del Hip-hop, amalgamas, tiene compases un poquito más complejos. Se ha creado un equipo muy humano, muy guay. Nos lo pasamos genial tocando y fuera del escenario. Entonces, fue increíble. En el otro concierto, el del Swing [Jazz & Dance], poder conectar con Agustín, el bajista, con Cristo Pérez, el saxofonista Lanzarote, que es un Lamine Yamal ahí del tenor. Es una pasada. Nos estuvimos quedando juntos en el apartamento y fue súper guay. Veinticuatro horas al día escuchando Coltrane. Fue muy inspirador. Al día siguiente, tocamos en el Convento de la Laguna, fue precioso el tocar temas de cada uno de los músicos. Poder tocar un tema mío y también de los demás. La verdad que ese concierto, que fue como un ensayo y para adelante. Esos conciertos tienen mucha magia porque está todo muy fresco.

Totalmente.

Estábamos todos muy, muy concentrados en la música que era nueva para nosotros. Se creó una atmósfera muy, muy linda. Entonces, después, al día siguiente que volví, volví muy contenta e inspirada. Fue muy guay este festi.

¡Qué bonito, tío! La verdad es que estas reuniones o convivencias, o como las quieras llamar, esos…, un fin de semana junto con otros músicos, es una cosa de la que uno 100% sale enriquecido. La verdad es que sería muy raro, o sea, o se trata de una reunión que fracasa desde el principio por cuestiones externas. Pues mira, ahora todo lo que ha pasado en Valencia, ¿no? O por cosas raras. Uno cuando está con otros, cuando genera comunidad, cuando vive la experiencia de la comunidad, de no estar solo, estar con el otro, sale enriquecido siempre. Yo creo que musicalmente, o, mejor dicho, la música es uno de los canales o de los vehículos que mejor nos hacen entender a las personas, y que mejor nos permiten conectar y generar comunidad. Que al final, yo veo que es de las experiencias más bonitas que se puede tener en la vida.

Total, total, sí.

Estar con otros y aprender, aprender de los demás es, no sé, es una cosa guay. Y bueno, hablando de esto, de los proyectos, de los conciertos que me estás contando, ¿en qué estás focalizada ahora mismo? Lo pensamos todos, ¿no?, que son las preguntas las que nos guían. Entonces, ¿qué búsqueda o qué preguntas estás teniendo ahora? A nivel compositivo y de tus proyectos, pero también a nivel de estudio personal, de aprendizaje con el instrumento. Como si me dices, pues mira, tío, estoy leyéndome los Diálogos de Platón, ¿sabes? que me interesa mucho esa faceta también.

¡Qué guay! Me gusta un montón leer, además. Así que…, muy conectada con eso.

Toma, toma.

Y sobre todo ahora en lo que estoy enfocada y que llevo… Bueno, el primer concierto fue en abril. Es un proyecto muy jovencito, por así decirlo. Y es un proyecto que tengo a saxofón solo. Así como más en lo experimental, como también un poco más en la canción. Porque al final prácticamente…, bueno, todos los temas tienen letras. No son letras muy largas, pero la palabra tiene bastante peso. Es eso, saxofón, efectos, delay, armonizadores, y loop. Entonces lo voy grabando todo en directo y voy cantando encima. Y también utilizo elementos de la percusión del folclore canario.

¡Qué guapo!

Las lapas, que es ahí como la concha de un molusco, y hace un sonido que a mí me fascina. Las chacras, que son como una especie de castañuelas ahí bastante grandes. Un tambor también canario. Entonces introduciendo eso un poco. También haciendo versiones de melodías populares y reinventándolas ahí un poquito.

¡Qué bueno!

Y es en lo que he estado más centrada últimamente, porque tenía ganas de… Nunca había…, con el saxofón no es muy común, ¿no?, tener un proyecto en solitario. Venía apeteciéndome tener un viaje más de yo sola, de introspección. Está siendo muy lindo. He tenido bastantes conciertos en las islas.

¡Qué bueno!

El sábado pasado estuve en El Hierro, ahora la semana que viene voy a Lanzarote. Estoy centrada en eso. A veces se me hace difícil porque tiene un montón de limitaciones. Pero a la vez eso te ayuda a tener un camino claro. Y sobre todo también el estar escribiendo letras, pues también me motiva muchísimo. Y el…, claro, no tiene tanto de jazz. Hay improvisación, por supuesto, porque también va entrando. Y el jazz, ¿qué es el jazz? No, la eterna pregunta. Pero sí que hay mucho de la experimentación, de eso, del ambience, de la música atmosférica, del trance. Entonces estoy bastante en esas. Y también, pues, por requerimientos técnicos también del instrumento, pues también estoy teniendo que estudiar más. Lo mismo que comentaba antes con Cristian. Pues intentando… Había estado una época sin estudiar a fondo el instrumento. Pues vuelta a intentar sacarle todo el partido técnico del saxofón.

¡Qué bueno, qué bueno! Oye, y estas letras que escribes, entiendo…, ya he visto por ahí alguna cosa tuya cantando en este proyecto tuyo que es súper interesante. O sea, me muero de ganas de poder verlo en vivo, la verdad. A ver si te traemos para acá, para Madrid.

¡Qué guay! Ojalá, ojalá. ¡Yo encantada!

Porque mola mogollón. Pero…, ¿De qué hablas en tus letras? Y por extenderlo más, porque a lo mejor es una pregunta indiscreta y perfectamente puedes pasar. Pero… ¿Qué propósito hay detrás de tu música? Si es que lo hay. A lo mejor es…, no sé si me entiendes la pregunta. O sea, que…

Sí, sí.

Sí, bueno, imagino en este también eterno debate entre la música instrumental y la música lírica, donde hay letra y tal, que cuando utilizas la palabra la utilizas para dar algún mensaje. Pero a lo mejor, no, eh. Entonces, bueno, cuéntanos, ¿no? Un poco.

Sí, total. Yo ya en el proyecto anterior que creé, que bueno, ahí sigue y tengo ganas de seguir desarrollándolo, Aguayro, que es con banda. Ahí hay algunos temas cantados porque ya tenía ganas de ponerle un poco de palabras a la música porque al final me gusta mucho la música instrumental, obviamente, que es la que más he hecho en mi vida. Pero también he consumido muchísima música cantada, como todo el mundo, creo, como casi todo el mundo.

Así es.

Entonces me apetecía adentrarme en ese mundo de lo que es el escribir letras. Y aquí en este proyecto, poquito a poco fue…, al principio no lo tenía en la mente que fuera cantado, pero cuando vi que casaba bien, porque al final el saxofón tiene un timbre que encaja bastante guay con la voz.

Totalmente.

Y como instrumento acompañante creo que funcionaba bastante bien. Yo no me considero cantante para nada, de hecho, ahora estoy por primera vez yendo a clases de canto.

¡Qué guapo, tío, estas cosas!

Con Yexza Lara, con la máquina, que seguro que la conoces. Y entonces como intentando explorar eso, también con sus limitaciones, pero contenta de poder expresar. Escribo lo que va viniendo, también me gusta que vaya en la misma línea de la música, que es bastante abstracta. Entonces he optado por una escritura bastante abstracta en la que uso mucha la metáfora o realmente digo una frase completamente random, pero que a mí me resuena con lo que voy sintiendo. Tengo una letra que es un tema que todavía no ha salido, que la escribí porque…, tenemos aquí una planta que hay…, en un montón de sitios, sobre todo en las zonas más secas se llama ahulaga y es todo espinas…, es como todo púas. Y el otro día iba caminando por mi barrio y me encontré una que estaba llena de flores y pensé: “¡Qué lindo que una planta tan seca y tan espinosa pueda tener flores!”. Al llegar a casa un tema que era totalmente instrumental que había decidido que se quedara así, incorporé la palabra y fue como “vale, ya creo que esta letra se queda”, y efectivamente hasta el nombre de la canción le cambié para eso.  Hay una artista argentina que me ha inspirado un montón para esa manera de escribir letras así muy abiertas, se llama Juana Aguirre. Tiene un proyecto precioso a mí me…, conecto mucho con ella y la manera de escribir me ha inspirado un montón para las letras de Pleito, también ayuda.

La verdad que cuando la escritura…, cuando la lírica es sugerente pero dentro de que es sugerente es también muy abierta, mola mucho. Porque también dejas un poco ahí, libertad la interpretación y…

De interpretación, total.

La experiencia que hace el artista de ver como 10 personas hacen 10 experiencias diferentes, mola mogollón porque es como multiplicar por 10 tus posibilidades. O sea que.., ¡qué guapo! ¡Que siga la cosa por ahí, Alba! Y luego otra cosa que me gusta mucho de lo que dices, Alba y que da gusto y que también transluce un poco el potencial que tienes y que tiene tu arte es este ejemplo que has puesto ahora. Que veías esta planta con flores y todo eso fue inspiración. Es alegría, ¡qué alegría me da que haya artistas como tú que observan la realidad con este nivel de atención! Porque, o sea, que ahí es donde ves que…, o sea casi la música en este momento se confirma que es buena, no sé si me entiendes, ¿no? Porque hay unos ojos y una mirada que observa más que los demás, ¿no? Y entonces entiendes por qué en este caso, tú, Alba, pues eres una voz interesante para todos, para todos interesante en el sentido de que nos interesa escuchar y ver qué dices, ¿no?

Joe, gracias.

Porque ves más allá, ¿no? Seguramente otros caminando por ahí lo hubiéramos pasado por alto, ¿no? O sea que nada, la verdad es que, ¡qué placer charlar contigo, Alba!

Igualmente, igualmente, encantadísima.

Seguiremos en otra ocasión, si puede, ser presencial, a ver si te traemos para acá, ¿eh?

Ojalá, ojalá, es la intención, es la intención.

Es la intención, me alegra mogollón. La verdad es que nada, ha sido un placer, Alba. Eres una artista que prometes mogollón y nada, has estado charlando de cosas súper interesantes y te lo agradecemos mogollón desde In&OutJazz. Y nada, estamos en contacto para más y mejor.

Por supuesto, por supuesto, estaré ahí también siguiéndoles. Mil gracias, de verdad.

Alba, oye, a tope, ánimo con todo.

Igualmente, un placer.

Chao, chao.

Buena tarde, chao.

In&OutJazz: Es un placer supremo tenerte en In&OutJazz para este momentín juntos y esta breve entrevista. Que sepas que somos una revista que nos encanta dar voz a los artistas, que estáis proponiendo cosas nuevas y cosas frescas. Y la verdad es que tu paso por el Canarias Jazz Showroom no nos ha dejado indiferentes.

Christian Cabrera: Tío, placer inmenso para mí. Conocer a Begoña…, que se acerque la revista, me parece increíble. Tanto también por parte del festival que nos haga participar en el rollo, me parece, o sea, inmensamente agradecido, de verdad.

Nosotros te brindamos nuestra enhorabuena, la verdad, por tu participación y tu tremenda música, de hecho, nada, si quieres, cuéntanos un poco cómo ha sido la experiencia del fin de semana en general, con el resto de músicos, de proponer tu música adelante, ¿cómo ha sido tu paso por el Canarias Jazz Showroom? ¿Qué tal ha ido?

Pues ha sido increíble, no sé, para mí es de los primeros festivales en los que participo, tío, y aquí a nivel Canarias tiene un gran prestigio ese festival, y para mí era un honor inmenso participar, y más exponiendo mi música. Empecé este año a exponerlo un poco, todavía no he conseguido subir a las plataformas, de hecho, te pido disculpas por la espera que te he hecho pasar.

Nada, nada.

Y nada, un orgullo. Un orgullo, o sea, muy contento y, ¿qué te digo? O sea, encima de ser premiado, no me lo esperaba, la verdad, me pareció una virguería. O sea, un saludo para Kike Perdomo, por maestro.

Total.

Y nada, contento que a la gente le haya gustado, pensé que era un poco disonante con el rollo, pero parece que no, que encajó bien, y contento, la verdad. Ahora que me preguntaste también por el fin de semana, qué curioso, porque…, ese fin de semana fue una pasada. También conocer a los demás premiados. A Alba (Aceytuno) la tengo en el grupo, tengo la suerte de contar con ella, me parece una maestra total. Yo la llamo la diosa del viento, eso es así, una crack, y su música también es maravillosa, me encanta, o sea, soy fan de su música. Pero también conocer a Cristo (Pérez) fue una virguería, porque no lo conocía de nada, o sea, primera vez que lo tenía delante y me quedé como “¿what? ¿ no es el Michael Brecker este?”. O sea, me pareció una virguería, sinceramente, para la edad que tiene. Y todo el talento que hay en Canarias, me parece abrumador. Para lo pequeño que es el sitio, para los poquitos que somos, hay gente ahí despuntando, me parece increíble.

Totalmente, lo subrayo, lo subrayo, la escena en Canarias está apuntando alto y estáis ahí con un listón, pero bien, bien, bien avanzado. La verdad es que es un gusto. Es un gusto porque enriquecéis todo vuestro paso y todos aquellos que nos pasamos por allí siempre nos sentimos enriquecidos totalmente. Tío, tu música, como dices, podría para cualquier oyente considerarse, bueno, de cierta complejidad. Tienes una música, no sé, de cada…

Sí, se podría englobar un poco dentro de lo que es música elaborada. O sea, sin quitarle prestigio a ninguno, ni más simple ni más complejo. Pero sí, es un poco elaborado el rollo.

Cuéntanos si quieres un poco de dónde nacen tus composiciones, cómo las concibes, si coges la guitarra y empiezas…, si nace de la guitarra, si nace de una melodía, o sea, ¿cómo es el proceso? ¿Qué proceso vive Christian Cabrera antes de poner en papel o en sonido sus ideas musicales, sabes? Porque son composiciones que realmente me llevan a esta pregunta.

Pues mira, lo de componer, lo de tocar, es una cosa que llevo bastante como… Quiero decir, lo digo con la cabeza bastante agachada. En plan, estoy como dando mis primeros pasos en cuanto a exponer lo que yo hago. Personalmente, lo que a mí me gusta, en cómo yo enfoco la música y cómo la siento, mis propias ideas y tal. Y lo que he hecho, por ejemplo, para este primer álbum que va a salir ahora, a lo largo del año que viene, empezaré a sacarlo temita por temita, ha sido un poco recopilatorio de ideas que tengo desde que empecé a decirme a mí mismo “coño, pues mira, esto suena bien, me gusta cómo estoy tocando esto, tal, esta idea, me apetece explorarla un poco más”. A veces a nivel conceptual, explorar conceptos más allá de directamente tocar y que te salga algo.

Claro.

Claro, desde una idea principal que nazca de aquí, más que directamente de la propia música, ¿no? Pero bueno, ha sido un recopilatorio de ideas que he tenido que digo, “bueno, de todo lo que tengo en la mente, así que lo he guardado con el tiempo, esto creo que merece ver la luz”. Así como de primera para decir “bueno, ¿qué es Christian Cabrera? ¿Qué siento cuando compone?” Pues, esto es un poco lo que he buscado. ¿De dónde ha salido? Yo creo que, de experiencias vitales, sin duda ninguna.

¡Qué bueno!

O sea, creo que las épocas en las que más ha aferrado he estado al instrumento, más así como por decirlo creativo, ha sido tanto etapas muy alegres como etapas más duras. Y yo creo que ese estar tan conectado con los sentimientos, debido a esos momentos que todos en las experiencias vitales podemos tener, creo que es lo que más me ha hecho desarrollar esas ideas. O sea, como que me gusten ciertos colores, ciertas emociones que generas con la música y decir “esto es lo que le quiero dar forma”.

Interesante.

No sé si respondo…

No, no, total, total, total. Me gustaría tirar un poco del hilo y preguntarte qué tipo de experiencias vitales, si no es indiscreta la pregunta.

Pues mira, justamente ese tipo de preguntas no me gustan mucho que me las hagan. La verdad, soy bastante…, como quitando con la gente que está más cercana a mí, soy bastante un poco cerrado, a lo mejor, en cuanto a mi vida personal. Pero sí, algunas experiencias, pues, durillas. No quiero entrar en detalle.

No, no, por favor, con total libertad. Nada, yo creo que cuando la música nace de uno mismo y de la vida de uno mismo, tiene un poso que, aunque no sepamos cuál es, los oyentes, lo percibimos. Percibimos esa profundidad y yo creo que estamos con muchas ganas de que enseguida salga tu proyecto. ¿Qué músicos tienes en tu proyecto? ¿Cómo has pensado en la banda? A la hora de traducirlo al arreglo, a la hora de traducirlo a la orquestación, ¿de qué te has servido? ¿Qué te ha influenciado?

¿Me preguntas por los músicos o por las influencias que me ha llevado a decidir qué tipo de músicos?

Sí, un poco por las dos cosas. ¿Quiénes son y por qué ellos? Así más sencillo puesto.

Pues mira, es curioso porque arranqué, como te digo, arranqué este año. O sea, el año pasado, el verano pasado me decidí a coger las ideas esas que tenía y a decir “venga, va, pues voy a arrancar con…, tengo que decidir de todo lo que tengo, algo, arreglarlo bien y dejarlo preparado para poder tocarlo con más personas”. Al principio empecé con una banda que era más cercana a mí, más gente con la que estaba tocando muy a menudo. Y empecé el año pasado. Pero claro, por falta de tiempo y entre otras cosas, al final los demás…, estamos todos ocupados. Al final hay que priorizar cada uno en su vida y demás…

Claro, claro.

Y bueno, este proyecto la verdad que era como un poco lo que te dije. O sea, es la primera vez que expongo algo que hago yo. No sabía qué recepción iba a tener. Se lo ofrecí a mis colegas, más que nada, al principio. Lo típico, gente con la que tocas a menudo, “oye, chicos, desinteresadamente, ¿les apetece probar esto a ver qué pasa?” Total, no pudo cuadrar por lo que te digo, falta de tiempo y demás. Y al final me vi como en una disputa de que ya había arrancado, ya había hecho un par de bolos con esta banda. Y la gente como que había tenido una buena respuesta. Inclusive el maestro Kike. Lo había invitado yo al primer bolo que hice ahí con toda la actitud del mundo. Invitar al maestro a que te venga a ver y demás. Y la verdad es que le gustó y que le gustará a alguien como él que tiene un bagaje inmenso dentro de la música. No sé si tiene 17 discos o algo así publicados por lo menos. Me pareció como curioso, no lo esperaba. Y también tuve cercanía por parte del público más amateur, en cuanto a la música. Y dije “coño, pues qué bueno que ambos sectores…” Como que lo que tú dijiste antes también. O sea, cuando el músico muestra su realidad a través de su arte, independientemente del arte que sea, como que el público lo llega a captar.

Totalmente.

Entonces, bueno, pues me di un…, desde antes de empezar esos bolos y de pasar esas experiencias, me vi como con un miedo al abismo. Y después de eso dije, “vale, pues mira, esto es lo que hago yo, a mí me gusta y parece que la gente conecta; tengo respaldo de gente que considero que su opinión importa mucho, por lo menos para mí”. Dije, “bueno, para adelante”. Entonces, cuando no pude contar con la banda que tenía, decidí directamente tirar alto. Y los mejores músicos que vi alrededor aquí por Canarias, les pregunté directamente. Por ejemplo, fue el caso de Alba, fue el caso de Pablo Díaz, un teclista increíble que al año que viene también va a sacar alguito, esténse pendientes. Luego el caso de Dani (González) es un poco más especial porque fue un poco de rebote. Yo había hablado con Nasim López Palacios. Nos conocemos de Canarias y artísticamente. Un artista increíble, recomiendo que lo chequeen. Pero al final no le cuadro tampoco, él está viajando muchísimo, hasta ahora creo que por Holanda. Y total, que al final acabó cuadrando Dani, que era el otro baterista al que yo lo tenía chequeado hacía ya mucho tiempo. A parte de coincidir con él en las típicas jams de aquí, de la cuna del músico de jazz de Canarias que es como, las jams de premusic. Y bueno, Dani fue el caso, fue el hombre y para adelante. El caso de Carlos Costa, que es el bajista, a mí me parece una de las leyendas a nivel Kike de aquí de Canarias, de la vanguardia canaria. Pero de hace 20 años por lo menos.

Sí, sí, veterano de los grandes.

Sí, sí, totalmente. Creo que fue alumno de Steve Coleman, o sea, increíble. Y fue un acercamiento curioso porque fue a través del seminario de Jazz de Garachico que hacemos aquí en Canarias, que es muy interesante también. Traemos a músicos, bueno, trae Kike y toda la asociación que tiene de músicos, trae gente muy increíble de profesor. Pasamos una semana con ellos, la verdad que una pasada. Y fue a raíz de que yo…

Esto es en verano, ¿verdad?

Yes.

Sí, sí, que tengo contacto…, este verano pasado estuvieron Dani Juárez, Sean Clapis…

Albert Bover…, o sea un elenco increíble este año.

Sí, sí, es una gozada, esas experiencias de convivencia. Yo intuyo que Canarias Jazz Showroom para vosotros ha sido algo parecido. Pero esas experiencias de convivencia, de tocar, de compartir, de aprender, de escuchar, de charlar…, o sea, son pura vida, tío, es una gozada.

Más el contacto personal, tío que luego tienes fuera de la música, al estar conviviendo durante esa semana, eso es indescriptible, es inigualable, no tiene precio que le puedas poner, ¿sabes?

¡Qué bonito!

Llena muchísimo, tío Sí ¿Por qué te he estado diciendo esto?

No, porque habías conocido al…

Ah, sí, al caso de Costa, de Carlos. Tío, que fue que me tocó, dentro del seminario hay unas clases que son de combo y bueno, Kike me preguntó “mira, ¿quieres estar con Sean Clapis?” En plan, el guitarrista que ha estado de profe este año que iba a estar con Carlos. Y yo sabía que Carlos tenía lo que llaman Speaking Rhythm, que es un proyecto que tiene él donde trata mucho el ritmo al estilo Steve Coleman. Y a mí me flipa mucho esa onda. Bueno, me dijo Begoña que tú eres baterista, ¿no?  En plan, tú, te tiene que molar mucho si te vas a las amalgamas, a la polirritmia, eso está…

No, no, todo su lenguaje, todo lo que han desarrollado con M-Bass, tío, es una ida de olla máxima.

Tío, pues, total, total. Entonces, claro él vino un poco a explicar esa onda y él no me conocía a mí de nada, ni a los demás que estábamos en el combo. Y yo, claro, yo a él sí lo conocía soy un gran fan. Y fue muy curioso porque, bueno estábamos tocando un tema en el que él mismo dijo “bueno, chicos, esto es complicado, esto es algo diferente, no sé qué”. Yo lo entiendo, como profesor, intentando dar un poco a entender a alumnos que a lo mejor no están tan adentrados en el M-Bass o no saben ni lo que es. Y dice “bueno, esto lo vamos a hacer vamos a hacer On Green Dolphin”. Era un 17 más 16, en plan, una volada con muchos cortes en medio. Y recuerdo que estaba explicando, y yo en la segunda clase, pues eran como cinco clases, los cinco días de la semana. Le dije “tío, no lo termino a pillar del todo ¿Me puedes repetir el canto completo? Porque estábamos como yendo por partes, primero un día, luego el otro, muy lento para mi gusto, la verdad en ese momento. Y le dije “¿Me puedes repetir el canto completo para yo hacerlo, para tenerlo dentro ya, para ir practicándolo?” El viernes teníamos un bolo. Y me dice, me lo dijo así con toda la actitud: “Christian, no lo vas a hacer a la primera”. Y yo “maestro, por favor déjame intentarlo”. Total estaba Kike de hecho en la sala, y lo cantó y lo hice a la primera. Eran 33 compases.

Toma ya, tío.

Se quedó sorprendido. Me preguntó si yo tocaba, tenía composiciones. Yo aproveché y cuando terminó la clase le dije “¿Cómo tienes la cabeza para pensar?” Un poquito tirando de broma. Y me dijo “nada, fresca, vamos a ver”. Y le hago tocar un tema mío que era uno de los que va a salir dentro de un mes y pico, de los siguientes temas dentro del álbum, y se quedó como “¡Wow! Esto está muy bonito”. Y fue por parte de él que le llamé. Porque yo en principio iba a quinteto. A mí me gusta mucho la formación donde el teclista toca el sinte, el synth bass ¿Sabes? Sin bajista. Pero claro si Carlos Costa se ofrece a tocar…

Tremendo ingrediente.

Yo estaba encantado. Para mí fue un orgullo y luego la conexión que tuve con él a nivel personal, más allá de la música. Cuando ya entablamos un par de veces y hemos tocado ya un par de bolos, me parece una persona increíble, tío, o sea, lo admiro muchísimo. A cualquiera de la banda, o sea, me parece gente…, un grupito de calidad.

¡Qué gozada que el entramado de una banda, en este caso la tuya, esté absolutamente alimentado y construido a partir de este tipo de vivencias, relaciones, experiencias, gustos compartidos y luego sobre todo buena vibra, buena voluntad, deseo de…!

 Además, es muy personal. No es lo mismo trabajar un poco de mercenario donde vas a los bolos para cobrar el caché, te toque con quien te toque y es lo que hay. Pero cuando ya es algo personal tío, que te toca a ti la fibra, intentas que haya…, que sea un poco dentro de lo que cabe, recíproco, dentro del grupo. Que sea una cosa que los demás sientan también y que haya y se consolide de alguna manera más allá de lo que es tocar. Para mí es necesario.

Totalmente tío, totalmente. Estamos con muchas ganas de escuchar tu proyecto, tío. ¿Cuándo crees que estará?

El álbum completo, yo creo que tendrán que esperarse para el verano que viene o como mínimo en mayo, sí. Pero lo que es tema a tema, yo el primer tema por lo menos lo voy a sacar si no a final de este año, ya a principio del 2025. O sea, a principios de enero, segurísimo.

¡Qué buena noticia Christian! Nos vas a tener ahí poquito a poco gozando, que es lo que más mola.

Exacto, tío.

Pues, tío, ha sido un gozo hablar contigo este rato. De verdad que estamos deseosos de coincidir más contigo, de escucharte por aquí por Madrid, de escucharte…

Ganitas, ganitas de ir para allá, sí señor.

Totalmente, tío. De cruzar, de cruzarnos, de compartir, de seguir esta aventura tío que es poner delante del mundo una música fresca que realmente yo confío y concibo que refresca el alma tío.

¡Qué grande, maestro!

Así que, de verdad, enhorabuena por todo lo que estás haciendo, por todo lo que has conseguido ya y… Vamos, te auguro lo mejor, o sea vendrá lo mejor seguro. Y tío que muchas gracias por haber estado aquí, Christian, con nosotros charlando de todas estas cosas tan interesantes: de tu proyecto, de tus inspiraciones, de tus intuiciones, de formar…, de cómo formar tu banda, de tu paso por el Canaria Jazz Showroom y luego bueno oye un shout-out importante a toda la escena de allí que estáis realmente haciendo cosas increíbles o sea que enhorabuena y muchas gracias, muchas gracias por estar con nosotros. Seguimos juntos, tío.

Es un placer, muchas gracias tío, vuestra labor es super importante también. Tanto Begoña como la tuya me cayó genial. Enhorabuena tío y muchas gracias.

Grande Christian, que vaya todo bien y nos cruzamos tío, nos vemos.

Venga, vamos hablando.

Chao, gracias tío.

Cuídate.

Cristopher Pérez: Buenas tardes.

In&OutJazz: ¡Qué bueno verte, tío, de nuevo! Aunque sea por la pantalla. ¡Qué placer, macho, qué placer tenerte, qué placer poder acogerte en In&OutJazz! La verdad que…

Lo mismo digo tío, un placer. El placer es mío, tío, joder.

¡Qué bueno, qué bueno! Nada, la verdad es que desde la revista somos varios los que colaboramos y trabajamos para dar voz a artistas que estáis ahí empujando y proponiendo cosas frescas dentro de lo artístico-musical. Y no sé, la verdad es que tu paso por el Canarias Jazz Showroom no ha pasado desapercibido. Y te venimos siguiendo ya desde hace tiempo. Yo ya comenté “oye, tío, este tipo mola mucho, tal”. Y la verdad es que nos encantaría conocerte un poco más. Por eso estamos contentos de haber concertado la entrevista contigo, la verdad.

Coño, qué guay, tío, qué guay, me alegro.

Desde el principio…, y yo creo que sería bonito que nos contases un poco, para empezar, cuál es tu relación con la música, cuándo empieza, cómo empieza y cuáles son tus…, tus mayores influencias que te llevan hasta el día de hoy, como músico y como persona también. No tiene por qué ser musical la influencia.

No, bueno… La música empieza desde el principio, ¿sabes? Desde…, desde antes de nacer ya estaba en la barriga de mi madre y mi madre cantando, ¿sabes? Porque mi madre canta y mi padre toca el saxofón y, claro, desde ahí se formó…, se formó todo.

Qué bueno.

Sí. Y por eso tuve la música desde pequeño. Tenía en casa un piano, una sala como de música, un piano, un bajo, tenía una batería. Aunque no toco esos instrumentos, pero jugaba, ¿sabes? Jugar.

Lo mejor del mundo, tío, poder jugar con la música, que es la mejor sensación. O sea, es así como se hace mejor la música, ¿no? Y más bonita. Total.

Sí, yo creo que… Yo creo que esa es la buena manera. Bueno, a ver, hay un montón de maneras de aprender música. Pero una de las maneras, si eres niño, es como jugar. Y dejarse de teoría, a lo mejor, y simplemente jugar.

¿Y qué influencias, qué músicas, qué artistas te llevan a ser el músico, compositor e intérprete que eres hoy? Es muy larga la pregunta. Bueno, acota a, yo qué sé, una lista pequeña. O lo que te venga en el fondo. Improvisa, que eso sabes hacerlo bien.

Hahaha, bueno, es que no sé, hay un montón de influencias al final. Y de todas las músicas, ¿sabes? Porque en mi caso, en verdad, siempre se escuchó de todo. Aunque más esa parte instrumental, jazzística. Pero tampoco se escuchó mucho jazz, jazz a fondo, ni mucho…, ¿sabes? No muy fondo, sino todo muy como día a día, ¿sabes?

Mezcla de todo.

Sí, exacto, mezcla de todo, de un poco de clásico.

Picoteando de poquito a poquito.

Exactamente, justamente. Y… a ver, las típicas influencias, Coltrane, yo que sé, Parker. Sí, también grupos de estos alternativos, o de otro género, por ejemplo, The Police, Sting, cosas de estas…

Oh, qué bueno, tío.

Sí. Aparte que mi madre cantaba, bueno, sigue cantando todas esas canciones. Siempre escucho y eso me viene de mi madre cantando, ¿sabes?

Qué bueno, tío. Nada, nada, eso nos une, porque yo creo que fue por Stewart Copeland, que cuando era pequeñín también dije “yo quiero darle palazos a lo que sea como este lo hace”, ¿sabes? Porque sí, sí, totalmente. Police, la verdad, es que a mí me ha marcado también. Qué bueno, qué bueno.

Ya, ya. Aparte, los ritmos. Ahí, casi, estaban todo guapos.

Todo, tío, todo. La verdad que los tíos, pues una vez más, ¿no? Proponían cosas frescas ahí en el new wave y en el punk de aquellos años.

Sí, literal, literal.

Era una cosa guapa, sí, sí. Qué bueno, tío. Qué bueno. ¿Cuál ha sido tu experiencia en este fin de semana, en el Canarias Jazz Showroom? ¿Y qué es lo que te has llevado de ahí, de ese fin de semana? Aparte del super premio, evidentemente.

Bueno, el premio al final es lo de menos. Lo que más es estar ahí rodeado de los músicos y de las personas ahí. Y de tantas personas que son increíbles, ¿sabes? Al final, yo no me había juntado con músicos de Canarias todavía. Porque salté directamente de Lanzarote a Barcelona. Por eso no había coincidido con músicos de Gran Canaria ni Tenerife, ¿sabes? Y me junté la primera vez y fue brutal, porque yo no conocía a esa gente, ¿sabes? Era como la hostia. O sea, gente que tocaba muy bien. Muy bien. Bateras, contrabajistas, bajistas, teclistas, flautistas, otra saxofonista. De locos.

Está claro que hay una potente escena ahí en Canarias. Y que muchos estáis ahí poniendo el listón alto, tío, poniendo el listón alto.

Yo me sorprendí. Yo me sorprendí cuando llegué ahí. Digo, ños, coño, toda esta gente en verdad… O sea, poco se habla de Canarias.

Bueno, en los últimos años, gracias a Dios, la verdad es que nos estamos enterando de que hay que aprender mucho de todos, y en concreto, la escena de Canarias está siendo reveladora para todos, yo creo. Y con todos los que habéis crecido allí, aunque tú estés en Barcelona, quiero decir. Que eso es interesante.

Sí, lo que pasa es que sí que es verdad que todos los canarios, que son músicos a lo mejor, y salen de Canarias, es como que tienen una tendencia, ¿sabes? Como a volver.

Eso es bueno.

Es como extraño.

No sé si bueno o malo, pero es interesante y no me desagrada.

Es algo.

En el sentido de que todos volvemos a la tierra, tío. O sea, hay una pulsión ahí humana que te lleva a eso. Pero bueno, es más allá de esta cuestión que casi es cultural y sociológica, yo diría que la música que está proponiéndose allí en las islas, tío, es increíble, es increíble, la verdad. Y que los músicos que habéis salido de allí sois increíbles. O sea que la verdad es que no se puede decir…

Pero como en todos lados, al final, la gente para todos en todos lados.

Esa aclaración está bien, es justa.

Es justa, es justa.

Nada, nos molaría saber en qué andas focalizado ahora, tanto a nivel de proyectos y composición, como a nivel de estudios. Estudio personal del instrumento o incluso, yo qué sé, igual estás aprendiendo ciertas recetas de cocina o lo que sea. O sea, que no tiene por qué ser musical.

Jajajaja.

Que entiendo que la vida es más grande, por eso te digo. Pero bueno, cuéntanos un poco qué proyectos estás focalizado ahora, en qué estás componiendo, si es que estás componiendo. Y bueno, un poco ahí la onda presente de Cristopher Pérez.

Mira, ahora hay un concurso aquí, bueno, en verdad es en toda España. Y estamos ahí con Manuel, Manuel Luque, ¿lo conoces? Contrabajista.

Sí, ¿contrabajista?

Sí, contrabajista. Vamos a ir con el grupo de Manuel Luque.

Ya vi que habéis grabado cosillas.

Sí, un disquito grabamos hace dos años con él.

Muy guapo, tío.

Sí. Y también estamos con una cosa que se llama, un grupo que se llama Delicious Collective, que es como, bueno, es un sexteto de amigos y también estamos con mi cuarteto haciendo cosas también para el concurso justamente. Y a ver si hay suerte y quedamos segundos o primeros, a ver si…

Dale, dale, sí, sí, sí, por favor, joder.

Y nada, componiendo para eso estoy, a ver, me dan más ganas de ensayar componiendo para eso. Estoy ya frito, ya tengo la cabeza que sale humo.

Qué bueno, qué bueno.

Pero bien, bien.

Y a nivel de estudio personal o de motivación personal, ¿en qué andas? Yo siempre suelo decir que lo que nos mueve a las personas son las preguntas más que las respuestas. Las respuestas nos dan un gozo especial, un placer especial, ¿no? Pero son las preguntas las que nos guían, ¿no? Entonces, ¿qué preguntas o qué búsqueda reconoces dentro de ti a nivel musical actualmente? Si es que la hay, o sea, no sé. “Pues estoy buscando multifónicos, pues estoy” ¿no? Desde cosas más concretas, técnicas, hasta, oye, igual, “pues estoy buscando la divinidad”, ¿sabes? O sea, cualquier cosa será interesante.

Ya ya, oye, siempre hay muchas preguntas, siempre. Porque la música, y esta música es así, siempre hay, todas las preguntas están. Y no faltan algunas, ¿sabes? Por ejemplo, ¿qué quieres decir con tu música, sabes? Y esa pregunta ya tiene millones más, ¿sabes? Y es como, ¿cómo respondes a eso, sabes? No puedes. Tiene que ser preguntarte más cosas e ir tocando y haciendo. La pregunta que tengo yo es esa. O sea, la mayor pregunta es, ¿qué tú aportas con tu música? O, ¿qué quieres decir tocando? ¿Sabes?

Qué bueno, qué bueno.

Tú mismo, tú mismo. ¿Sabes? Tú solo.

De la propia, una pregunta que va hasta el fondo de la propia identidad, ¿no? Como músico. O sea, ¿quién quiero ser desde la música?, ¿qué quiero proyectar?

Incluso de la persona. Porque la música, no hay música si no hay persona, ¿sabes?

Olé.

Va todo unido. Entonces, esa es la pregunta. ¿Qué quieres transmitir? Da igual que sepas escalas, que sepas no sé qué. Si tú no tienes como un mensaje, a la gente no le va a llegar, ¿sabes?

Totalmente. ¿Y cuáles son, ya que me lo dejas en bandeja, yo creo que nos interesa a todos, ¿cuáles son los mensajes que…? Dentro de esta pregunta general, que entiendo que es bonito, que la tengas presente, porque yo creo que muchos nos o se la saltan, nos la saltamos rápido esa pregunta y vamos a cosas concretas y entonces se te olvida la original, que es ¿qué quiero decir? y entonces nunca dices nada, ¿no? Pero, ¿qué mensajes concretos ves que estás intentando reflejar con tus composiciones? Pues estas mismas, ¿no? Las que decías, las que decías para el concurso, pero bueno, en general.

Buah…, y eso es bastante complicado, la verdad. Esa pregunta me mata, tío. Porque es la que yo estoy buscando. Es la que yo estoy buscando, porque al final…, lo que quieres decir es lo que eres y todavía hay que buscarse, porque siempre, toda la vida, te vas a estar buscando a ti mismo. Toda la vida. Porque nunca vas a tener la verdad absoluta de todo, tú vas a tener que estar buscándote siempre, musicalmente y humanamente, te vas a tener que estar como recomponiendo a ti mismo, ¿sabes?

Total, total.

No sé, no tengo la respuesta a eso, la verdad. Yo lo único que quiero es transmitir a la gente, como ser un espejo también, ¿sabes?, para la gente. Que la gente escuche lo que quiere escuchar y sienta lo que quiera sentir.

Interesante, tío, interesante. La verdad, mola, mola mucho. Yo creo que estas respuestas que estás dando, que son preguntas, validan o comprueban tu potencial musical, ¿no? Y lo que ya estás demostrando. O sea que…, por eso suena tan bien tu música, hermano, ole, ole.

Oye, yo también te he escuchado a ti, ¿eh? Los videítos ahí que subes. Suena crema eso, tío.

Ahí vamos, ahí vamos, tío. A tope. La verdad es que yo creo que es una…, tenemos la suerte de vivir… Bueno, de tener una sensibilidad o de sentir un llamado a la música y creo que los artistas tenemos la responsabilidad y a la vez el don de poder ver más allá muchas veces, ¿no? Y como tú decías, poder ser un espejo. Pero nunca lo había escuchado así, como lo has expresado. Y me ha encantado, tío. O sea que…, de estas entrevistas, todo el mundo, toda la gente que nos apoya, aprende, pero yo el primero, tío, porque me inspira mucho. O sea que te lo agradezco. Mola, mola. Nada, tío, por curiosidad. Ahí, una última preguntilla que me interesa. Quizá más concreta. ¿Qué música estás escuchando últimamente? ¿O de qué te estás inspirando musicalmente? ¿Qué hay en el Spoty de Cristo? O sea, si te metes a ver, ¿qué encuentras por ahí, no?

Si me meto en el Spoty ahí hay un potaje increíble. No, pero mira.

Aleluya, hermano.

Sí, sí, justamente ahora estoy escuchando más Kendrick Lamar y Slum Village. Sí, sí, por la cara.

Muy bien, tío, muy bien, muy guapo. Yo creo que todos tenemos que pasar por ahí, tío, por el Hip-hop del bueno, tío.

Sí, sí, total, total. Y aparte, es que desde que conocí a Theo Crocker, creo que fue hace un año, creo que fue, lo vi en Madrid. Un año y pico o algo de eso.

Hace poco has estado en Canarias, tío.

¿Eh?

Ha pasado por Canarias ahora en el tour que ha hecho, ha pasado por Canarias también.

Sí, tío. Y lo vi y digo, “fuah, qué pasada, me encanta esta música, tío”. Me encanta. Y vi la entrevista que le hiciste y está brutal, tío.

Y dice, y efectivamente está también en esa onda, ¿no? Escuchando también mucho…

Sí.

Un poco de Slum Village también dijo, ¿no?, que estaba escuchando, si no recuerdo mal. La verdad es que el tipo, el tipo es una gozada. ¡Cómo suena! Bueno, ya he visto yo alguna vez que estás tocando también la trompeta, tío.

¿Cómo es eso, tío? Está muy bien, muy bien.

Eso es random, total, tío. Chacho, chacho. Eso es que me entró la venada y yo qué sé, tío. Para hacer algo diferente, ¿sabes?

Tú crees que también te ayuda como a refrescar, ¿no? Un poco a veces o como a…

Sí, sí.

En plan…

Eso es lo que…

Para no quemarse, ¿no?

Sí, sí, total. Eso es de las cosas que más te ayuda, yo creo. Cuando tocas un instrumento que no sabes, o sea, es como te sientes bien. En vez de sentirte mal porque no sabes, te sientes bien.

¡Qué grande, tío, qué grande! Y qué guapo, porque cuando la música está dentro de uno y va de corazón, tío, da igual un poco el instrumento que le suelten que va a decir cosas, ¿no? O sea, que va a decir cosas que los demás pueden captar y entender, ¿no? Que como decías antes, basta lanzar un mensaje para que la música tenga ya en sí misma una potencia que todos vamos a reconocer como buena, ¿no?, y bella, la verdad es que sí, tío. Qué bueno.

Exacto, exacto.

Bueno, ¿y algo más o estás ahí a tope con Kendrick Lamar y Slum Village y punto y basta?

A ver, a ver, te voy a abrir este momento, a ver si encuentro algo más.

El chequeo rápido, el chequeo rápido. Eso está bien.

No, no, pues mira, también estoy con un trompetista que se llama Keyon Harrold, no sé si lo conoces. Pues es como de la onda esta, el Theo Crocker también, que viene el domingo, este domingo me compré la entrada, voy a verlo aquí también. Es como la onda esta, medio Hip-hop, jazz, no sé, tío me gusta mucho esa onda.

Qué bueno, tío, qué bueno. Pues nada, macho, la verdad es que estamos deseando escucharte por aquí, tío, en Madrid, a ver si te traemos.

Yo también.

A ver si te traemos.

Yo también a ti, tío.

A ver si te traemos para acá, será un placer supremo y extremo. Te deseamos lo mejor, tío, ahí en Barcelona con los concursos y con tu música, con tus proyectos y nada, de verdad, que ha sido un placer tenerte aquí.

El placer es mío, tío.

Es inspirador escucharte y también, cómo no, escucharte cuando tocas, ¿no? La música que nos donas a todos, tío, o sea que…

Coño, pero si toco yo solo, nada. Tengo que tocar con ustedes, ¿entiendes?

Exacto.

Hay que tocar todos juntos, tenemos que tocar todos juntos.

Así es, tío, qué alegría, qué alegría, sentirse juntos y ahí empujando todos para delante, tío, como debe ser. Así que nada.

Como tiene que ser.

Cristopher, hermano. Mil gracias, un placer.

Oye, mil gracias eh, un placer, eh.

Seguimos conectados, tío, y hablamos.

Sí, tío, si nos vemos por Madrid, tío.

100%, tío, 100%. En cuanto aparezcas por aquí, nos vemos, tío.

De una, tío.

Grande, tío, Cristo, tío.

Grande, tío. José, nos vemos, tío.

Abrazote.

Chao. Igual.

By: José Cabello Llano

Enero 09, 2025

Canarias Jazz Showroom 2024 – XVI Muestra de Jazz de Canarias

Canarias Jazz Showroom 2024 – XVI Muestra de Jazz de Canarias

CANARIAS JAZZ SHOWROOM 2024

XVI Muestra de Jazz de Canarias

09

Enero, 2025

Texto: Begoña Villalobos

Fotos: Concesión del festival y Kike Perdomo

 

El festival Canarias Jazz Showroom, fundado en 2009 para brindar apoyo a la cultura musical insular, está consolidado como uno de los grandes festivales nacionales. Este año el festival celebro la XVI Edición con una programación extendida por las islas además de una nueva ubicación en Madrid, constatando de esta manera que las Islas Canarias se mantienen como una potencia importante de jazz dentro del territorio español.

La muestra ésta comisariada por el saxofonista, compositor, y productor Kike Perdomo, conocido por ser un referente en la labor imparable por divulgar el jazz insular. El emblemático Auditorio en Santa Cruz de Tenerife acoge la muestra de jazz canario. Un edificio imponente de hormigón de estilo neo futurista situado al borde del Océano Atlántico.

El festival en Tenerife tuvo lugar los días 11 y 12 de octubre. Comienza con la invitación de la banda Cuarteto Federal, un grupo de artistas de renombre en el cada uno de los integrantes proviene de diferentes latitudes españolas. Una formación compuesta por el compostelano Xacobe Martínez Antelo al contrabajo, el anfitrión de la muestra de jazz canario kike Perdomo a los saxos, desde Cádiz Javier Galiana al piano y el catalán Guillem Arnedo, a la batería.  La invitación del cuarteto proveniente de diferentes comunidades es importante para el festival ya que supone un intercambio real, una apertura de puertas y una conexión entre cuatro de los puntos cardinales claves de jazz en España. Cuarteto Federal es un proyecto contundente, una alianza de jazz contemporáneo compuesta por músicos de dilatada experiencia, cada uno de los cuales es representante de la Federación de jazz de cada comunidad. La interpretación del cuarteto evidencia una compenetración excepcional, combinando tradiciones locales con un lenguaje jazzístico contemporáneo. El proyecto no solo resalta el talento individual de sus músicos, sino también su capacidad de trabajar como un todo, formando un verdadero símbolo de unidad dentro de la diversidad.

“Cuarteto Federal: un solo grupo compuesto por varias unidades descentralizadas. Un individuo está federado sí y solo si cada parte recibe a cambio de lo entregado algo proporcional y sí se entrega a la federación menos libertad de la que tiene el individuo. Cada individuo que acepta el pacto vive tan libre como quiere, y ese grado de libertad es superior a las obligaciones contratadas. Si no hay acuerdo no hay libertad”.

El disco que se presenta es Cuatro Puntos Cardinales, grabado en A Coruña en marzo de 2024 después de una semana de residencia artística en Galicia. Escuchamos temas contemporáneos como Vino Frito compuesto por kike Perdomo. Jota Federal, 4 Puntos Cardinais, tema que da título al disco, compuestos por Xacobe Martínez, la Habanera Federal de Guillem Arnedo, Oh Babel Oh, y como Congo Jake, temas contemporáneo y abiertos compuestos por Galiana con la interpretación lírica que le caracteriza, No lo sé, un pasadoble de ritmo vivo tocado en dos por cuatro compuesto por Javier Galiana, para acabar a ritmo de swing con la pieza Porto de Mar.

La segunda jornada comienza con Jazz & Dance Cuarteto. Un enérgico proyecto de música de baile y swing apoyado en dos de los mejores bailarines canarios, Raquel Lucille y Jep Meléndez (danza contemporánea, tap, etc). Una nueva propuesta dancística del festival que aúna el estilo más contemporáneo con el mas tradicional. Los bailarines son los protagonistas del proyecto junto a músicos como Fernando Angulo a la batería, Manuel Hernández al bajo y una sección de metales entre los que están Cristopher Pérez al saxo. El repertorio, diseñado cuidadosamente, consistió en una relectura de clásicos y composiciones originales que conectan las raíces del swing con las expresiones más contemporáneas. Los músicos y bailarines trabajaron en perfecta sintonía para crear un espectáculo en el que música y danza se fundieron en una simbiosis única, resaltando la fluidez y la conexión entre ambas disciplinas.

Para pasar a la entrega de los Premios Archipiélago de Jazz Canario, premios que reconocen el nuevo talento insular de los mejores proyectos e intérpretes del año. Recibe el Premio Mejor Solista, la saxofonista residente en Holanda Alba Gil Aceytuno. Premio de Mejor Compositor al guitarrista de Las Palmas Christian Cabrera. Premio Músico Emergente al saxofonista tenor residente en Barcelona Cristopher Pérez. residente en Barcelona

La noche se llenó de energía y frescura con el concierto del joven guitarrista, premiado como Mejor Compositor, Christian Cabrera, presenta el álbum Ethereal Vibes, su primer proyecto como compositor. Cabrera compartió el escenario a quinteto con Dani González a la batería, Pablo Diaz Ramos, en el piano y teclados, Alba Gil Aceytuno, a los saxos, Ana Ayala Vidaurrázaga, flauta y voz. Con un estilo personal, el líder construye todos los temas entrelazando lo urbano y lo vanguardista. La filosofía de Cabrera está basada en la asimetría rítmica y la ruptura de los patrones rítmicos tradicionales.

Abrazado a la filosofía de incidir en el ritmo mi proyecto está construido sobre y a partir del canto. Todo tiene que ver con el ritmo. Es asimétrico. Trato de romper el patrón simétrico rítmico”. Nos cuenta Christian Cabrera.

La siguiente parada del Showroom Canario es en el mítico club de jazz en Madrid, Café El Despertar. El cuarteto, liderado por el baterista canario Daniel González Quartet con kike Perdomo a los saxos, el guitarrista estadounidense Sean Clapis, Luciano González al bajo eléctrico y Daniel González a la bateríaEsta formación es fruto de la admiración mutua y la pasión creativa. El repertorio estuvo compuesto por composiciones originales del cuarteto y algún arreglo de estándar, cada uno impregnado de un carácter fresco e innovador con momentos de improvisación.

By Begoña Villalobos

Enero 09, 2025

Festa do Jazz (Lisboa, 2024)

Festa do Jazz (Lisboa, 2024)

FESTA DO JAZZ

Lisboa, 2024

19

Diciembre, 2024

Texto: Begoña Villalobos

Fotos: Fábio Teixeira

 

 

 

 

 

 

 

 

Con una programación variada y proporcionada tanto en la propuesta internacional como en lo nacional portugués, el Centro Cultural de Belém CCB, de arquitectura moderna de estilo cúbico situado frente al Monasterio de los Jerónimos, es el espacio elegido para acoger la edición 2024 del festival Festa do Jazz en Lisboa. Un festival que se celebra desde 2003.

 

En esta edición la programación está comisariada por la compositora y cantante Mariana Dionísio y por el acordeonista e improvisador João Barradas. El festival comienza con el grupo SARÃB, liderado por la enérgica, visceral y emotiva cantante sirio-francesa Climène Zarkan junto a Baptiste Ferrandis a la guitarra, Robinson Khoury al trombón, Paul Berne en la batería, Thibault Gomez al teclado y Timothée Robert al bajo. Una fusión de rock con resonancias árabes cargada de fuerza reivindicativa. La voz de Zarkan, amplificada en ocasiones por un megáfono evoca la llamada a la oración y conecta la tradición con la protesta, creando un puente entre culturas. Seguimos con el trío de enfoque en la improvisación libre Sonic Tender, formado por Guilherme Aguiar al piano acústico, João Carreiro a la guitarra eléctrica y João Valinho a la batería. Registrado por Robalo Music en el álbum debut del trío, Odd Objects. Es un trabajo de exploración sonora abstracta y minimalista donde el sonido se convierte en un territorio de constante descubrimiento. Es un proyecto intrigante y denso de estructuras complejas en las que no existe diálogo entre el trío, privando al oyente de cualquier sensación narrativa o punto de anclaje. Alejado de los convencionalismos, escuchamos el proyecto contemporáneo a dúo formado por la pianista portuguesa Joana Sá con la utilización de técnicas extendidas y manipulación de cuerdas al piano (rasgueos, punteos que evocan guitarras) y, sonidos electrónicos, campanas y otros matices percutivos enriquecedores. A dúo con el impactante dominio vocal de la griega Savina Yannatou, que transita entre el lirismo operístico y el riesgo experimental. La cantidad de efectos vocales genera un abanico multi vocal que oscila entre lo sublime y delicado con lo inesperado, e imprime un carácter de dramatismo, tensión y teatralidad. Su trabajo está registrado en Ways of Notseeing bajo el sello Clean Feed. Paralelamente y ubicado en el Antiguo Picadero Real del Museo Nacional Dos Coches tiene lugar el Encuentro Nacional de Escuelas, un fresco panorama de la música jazz, con un concurso único y la entrega de premios anuales. Seguimos en el CCB con el trío escandinavo liderado por la pianista y compositora noruega Liv Andrea Hauge que ha conquistado al público con Ville Blomster, su álbum debut. Este proyecto combina el lirismo y la belleza de melodías rítmicas y composiciones melancólicas con piezas enérgicas, creando un balance cautivador. Acompañada por Georgia Wartel Collins al contrabajo y August Glännestrand en la batería. Festa do Jazz presenta el estreno del dúo formado por Andy Sheppard y Aaron Parks, dos artistas de renombre con registros en ECM y Blue Note. Sheppard, uno de los saxofonistas más destacados de Europa, y Parks, aclamado pianista y compositor crean un diálogo musical lleno de lirismo y profundidad. Sus composiciones con un equilibrio entre la melodía y la improvisación son una experiencia sonora íntima y sofisticada de jazz contemporáneo. La banda Jazzopa combina soul, hip-hop y rap de ritmos irresistiblemente bailables. Destaca Iuri Oliveira en la percusión, Razy como cantante y bajista, Nitry con sus potentes rapeos y palabras habladas, y Mariana Bonito acompañadas por la sólida batería de Fillipe Padrão, Francisco Bettencourt al saxofón, André Silvestre en la trompeta y Goncalo Diogo Morais a la guitarra. Una fusión de energía vibrante. Uno de los platos fuertes de la noche fue Wajdi Riahi Trio  recientemente registrado por la discográfica española Fresh Soun Records con el nombre de Essia. Una propuesta brillante del vocalista y pianista belga-tunecino, música escrita e improvisada de raíces tunecinas. El trío se forma en Bruselas en 2020 junto al contrabajista Basile Rahola y Pierre Hurty a la batería. Escuchamos motivos repetidos e hipnóticos a modo de trance que desembocan en narrativas improvisadas de gran interés. Ritmos complejos de sorprendente musicalidad y contrastes bien conducidos, el canto y el silbido acompañan varias piezas y añaden mayor profundidad tímbrica. La entrega de los premios de Festa do Jazz 2024 corresponde al saxofonista José Soares, distinguido como Artista del Año. Vera de Morais como Artista Revelación y el premio al Mérito a María Joao. En la categoría Grupo del Año el premiado es el trio MOVE con José Valinho, Yedo Gibson y Felipe Zenícola. Uno de los puntos culminantes del festival fue el proyecto Reperio del vibrafonista, improvisador y compositor portugués emergente Duarte Ventura en una apuesta por añadir nuevas capas de sonido al incorporar las voces de Joana Raquel y Marta Rodrigues, y el violonchelo de Adèle Viret , junto a un destacado Iúri Oliveira a la percusión. Esta ampliación de quinteto a noneto añade capas y texturas que enriquecen la composiciones y arreglos de Duarte y mantienen una coherencia estética, temática y un compromiso con la exploración de nuevas ideas y sonidos en la música contemporánea. Con Miguel Valente al saxofón alto, Clara Saleiro a la flauta, Miguel Meirinhos al piano, Zé Almeida al contrabajo, y Luís Possollo a la batería. Como final de fiesta, escuchamos el Ensemble Festa do Jazz, dirigido por João Mortágua al saxo alto, que reunió a destacados músicos de su generación con una fuerte relación con la improvisación. Integrantes y nombres como Bernardo Tinoco al saxofón (líder del trío GARFO, Grupo Revelación del Año 2021), José Diogo Martins al piano, Francisco Brito al contrabajo, y João Lopes Pereira a la batería, miembro fundador de la editorial, promotora y colectivo portugués Robalo Music. Todos ellos figuras centrales de la vibrante escena portuguesa e internacional.

Written by Begoña Villalobos

Diciembre 18, 2024

Joe Lovano Interview (Festival Jazz Madrid 2024)

Joe Lovano Interview (Festival Jazz Madrid 2024)

JOE LOVANO INTERVIEW

Festival Jazz Madrid (2024)

12

November, 2024

 

Joe Lovano has come to Madrid to play with his Tapestry Trio, within the Madrid International Jazz Festival 2024. Marilyn Crispell at the piano, and the drummer Carmen Castaldi have been perfect companions for Joe since they all got together a few years ago.

 

In this little talk, Joe dives deep into his approach to the trio format, aswell as his lately inspirations and pursues.

 

Get ready to be inspired by this titan!!!

 

In&OutJazz: Hi Joe.

Joe Lovano: Hello!

My name is Frantzes Elzaurdia and I’m here with In&OutJazz. In&OutJazz is a magazine which focuses on avant-garde and contemporary jazz music. It has 15 collaborators all around the world, and it’s supported by Europe Jazz Media. Alright. So, first of all, I wanted to ask you, how are you doing? How are you feeling today? How’s Madrid treating you?

Well, I’d like to just say thank you for inviting me…

Oh, it’s a pleasure. It’s an honor.

…To speak and to share some ideas, and focus on the beauty of expression and the art of improvising. And what a blessing it is to live in the world of music.

That’s beautiful.

So I’m feeling… great!

I’m glad. I’m really glad. I want to ask you about this trio that you have, okay? How did it come to be?

Well, you know, it’s a long journey when you are on the scene, playing with so many people through the years… I would have to say in 1981 I joined the Paul Motian Band with Bill Frissell, and Bill Frissell and I played with Paul for 30 years. He passed in 2011. During that time, there were quintets, quartets. But the trio, with Bill and I and Paul, emerged around 1984. That approach and way of communicating and sharing space, with no bass, was a springboard into my trio Tapestry today. Somewhere around 2018 we started to play. My contract with Blue Note Records came to an end, after 25 releases, so I moved into a relationship with Manfred Iker at ECM records where I recorded quite a few sessions through the years. So, it just kind of was a natural thing that happened, in that kind of sequence of events let’s say. Marilyn Crispell, also records for ECM and played with Paul, also. So we played together with Paul in some Quartet settings.

Yeah.

So she is for me, one of the most poetic, beautiful and improvisers in music. So that just kind of came together very naturally. Carmen Castaldi was playing drums with us. We grew up together in Cleveland, Ohio. And from our teenage years, we played together. Now I moved to New York in the mid 70s. Carmen went to California and Las Vegas. But then he returned somewhere in the 90s, back to the East Coast, and we started to do things together from that time. He’s featured on my recording Viva Caruso, on Blue Note Records, I had a big percussion section, and Carmen and Carmen is part of that, you know, recording.

So, for me to create music and breathe together, to create music within the music, there’s a beautiful communication that happens and it’s about relationships. When you listen to the records in the history of music, you’ll find many relationships, whether you’re listening to Miles Davis’s bands; John Coltrane’s bands; Sonny Rollins music; Bill Evans’ music; Keith Jarrett’s music… You feel and hear music being created by the inner spirits of relationships, you know, so the true art…  This trio Tapestry for me, is a very expressive, amazing combination of people and music. You know, we have 3 releases on ECM now, Trio Tapestry, Garden of Expression and Our Daily Bread. So, between… within those three recordings, there’s many compositions. So, when we play, we have a big repertoire from the recordings, plus other things that we do, you know, some standard songs and some famous music, you know, that we might touch on as we’re moving through our set.

I wanted to ask you, how do you feel that the music has evolved, maybe composition wise, throughout these five years that you’ve played with this trio?

Well, the communication just gets deeper all the time. It really evolves from night to night from just listening and experiencing the presentation. And everywhere we play, there’s an inspiration from the audience, that feeds us, so that’s part of the evolution, you know? In my compositional approach, that has been evolving from playing with the trio, like when we’re not on tour, when we’re not playing any gigs, you know? After this tour, tonight… tomorrow night in Barcelona is the final concert of the 10 concert tour. Our next gig is going to be at the Village Vanguard in February. So during this time between now and February, New ideas might come for another piece, or just new ideas that come in the moment of now, when we are playing together.

Okay! And these more open pieces that you have example there was one in your latest album called The Power of Three…

The Power Of Three! Uh-huh…

Before playing those tunes, do you ever have, like any abstract idea that you tell your musicians before playing it or…

No, not in words, but like that piece, that particular piece is a written structure and a melodic shape and line that happens within a certain sequence of harmonies and intervals. Three note you know… it’s like the power of three people, and it’s the power of three notes, how the modulations happen in all 12 keys. So, the first time we played through that, I didn’t have to really say too much because I just played it… -(Sings the melody)-  And Marilyn followed her part, I had my part, and Carmen just listens and reacts. So that piece was took shape in the studio, without really speaking about too much, because the music speaks if you listen and when you’re playing in this kind of fashion.

Hmm. OK. And I wanted to say… maybe last question… Let’s see, would you say that this trio is some kind of tribute to Paul Motian?

I wouldn’t say tribute, but inspiration wise, inspired by Paul and his approach about music… and uh… I mean for example Carmen grew up listening and loving Paul Motian, he is I would say a Paul Motian disciple, hehe… From the earliest recordings of Paul with Bill Evans, you know? And other things… into the Keith Jarrett band, Charlie Haden, Dewey Redman, and Paul and Keith, you know? So it’s the music that inspires you to want to play. And Paul’s beautiful approach, in the history of jazz and the drums, is a very… it holds a very powerful place in the evolution of while creating inner music. I had a chance to play with Paul in many settings. There’s three or four recordings with Hank Jones on piano, George Mraz on bass, and Paul on drums. And for me, it was like, I was recording for Blue Note records, the first one,  I’m All For You, is a ballad, right?

Yeah.

But each tune has a different feel, you know?  The rhythm, the inner rhythms, and the things that happen… Then Joyous Encounter was the next one, and then we did uh… one of Billy Strayhorn’s music called Lush Life. And for Paul to play with Hank Jones, who… Bill Evans was a disciple of Hank Jones, so all of a sudden for Paul to be playing with someone that Bill came from, in like 2004, I think might have been the first, I’m All For You? That recording? Oh, that was a beautiful union! And they had never played together, but Hank was hip to Paul, from Bill Evans’ music and stuff, and Paul grew up listening to Hank! With Milt Jackson, and… heh!  Other recordings and stuff and just being on the scene in New York. Hank Jones, is like… the father figure for players like Tommy Flanagan and… Barry Harris, who were also from the Detroit area. Hank was the cat who had inspired all of them, and he was a few years older. Hank was born in 1918. Thelonius was 1917. So, when Hank came to New York in the 40s, he was there with Thelonius, and then he ended up… his first big gig I think were for him, was with Coleman Hawkins. And he followed… he followed Thelonius Monk, with Coleman Hawkins, Hank, in 1944, so… (Laughter) So my recording Kids, live at Dizzy’s, 2006… Hank was 88. He plays like he’s a teenager. His ideas, and flow, his approach as a pianist, but just as a… expressive musician, it’s inspiring man, it’s incredible. If you check that recording out it’s just duo, piano and tenor, live at Dizzy’s club, at Jazz At Lincoln Center.

Okay, I think that’s it! Yes.

Yeah, you’re good?

Thank you so much, thank you so much for this opportunity, and I really hope you have a good gig tonight…

Oh yeah, we’re going to have fun.

…With some nice energy for you to feed off, you know? Thank you so much. It’s a pleasure.

Thank you.

November 12, 2024

Kris Davis Interview – Festival Jazz Madrid 2024

Kris Davis Interview – Festival Jazz Madrid 2024

KRIS DAVIS INTERVIEW

Festival Jazz Madrid 2024

07

November, 2024

On November second, I had the pleasure of interviewing one of the greatest jazz piano players of these times, Kris Davis. Kris Davis is a renowned jazz pianist and composer known for her innovative approach to the piano and her contributions to the avant-garde jazz scene. With a distinctive style that incorporates extended techniques and a deep understanding of musical improvisation, she has collaborated with some of the most notable names in jazz today, from Dave Holland and Craig Taborn to Esperanza Spalding, Julian Lage, and Johnathan Blake, among others. Additionally, she leads her own projects and records under her label, Pyroclastic Records. Her work not only showcases her virtuosity on the piano but also reflects her commitment to expanding the boundaries of jazz music.

In&OutJazz: Hey there, Kris. It’s a pleasure to host you as a very precious and special guest in In&Out Jazz Magazine. Since the beginning of your career, you have explored the piano through extended techniques. What motivated you to delve into this constant exploration beyond the conventional?

Kris Davis: I heard the music of Benoît Delbecq, a French pianist, in 2004. He was doing a lot of prepared piano, using wood sticks and different materials… I was very interested in what he was doing, like how he was combining musical influences from György Ligeti, for example, and I’m a great fan of Ligeti. I am always trying new things; every pianist who does preparations finds their own material. I went to a couple of stores to find what I wanted; I was checking John Cage as well, looking at what he uses, and trying to get the material that resonates with me.

Pyroclastic Records is a label you have created, known for hosting some of the best avant-garde jazz albums. Where did this idea come from, and how is it developing?

I worked with a couple of labels around Europe, Fresh Sound Records, Clean Feed, and I had some funds to be able to produce and make some albums and music. At some point, I did not need financial help and support, and then I thought it would be great to create Pyroclastic to help extend a bigger community and include people I want to bring in who I like and what they propose. Pyroclastic is there to support adventurous artists when it comes to improvisation and composition. Everyone is very different; when people see Pyroclastic Records, they know it’s going to be good in terms of the packaging and the music. Being part of the improvised music scene in New York is what helped Pyroclastic come to life. Listening to people who take risks and create innovative music is essential.

Do you feel that you have had to struggle for recognition in the jazz world due to being a woman, especially in your role as Associate Director of the Creative Development Program at the Berklee Institute of Jazz and Gender Justice?

No, I feel that, considering I make challenging and unconventional music and bring different influences into my music, sometimes my music doesn’t get attention… but in a way, I have had attention, sucess and support, especially with the critics. I received support, and they respond to what I do; my music I feel gives something different from the mainstream. So if you are a critic and listen and see something that is different, with many influences and taking risks, you value it, you want to support it and uplift it.

You have developed a very defined and avant-garde personal language, and your playing style is unique and unrepeatable. Despite being a leader proposing concrete material, your work as a sideman is also notable. How do you experience this duality, if you perceive it as such, and how do you navigate between your own vision and that of others?

I think it is important to have different musical personalities in a band. When everybody approaches the same solo the same way, the music sort of loses its dynamic quality, so I am always drawn to bandleaders who are looking for different personality types. For instance, I played with Dave Holland for the last couple of years, and he is an amazing bandleader because he puts together people who come from different places and musical backgrounds, with different ways of thinking about how to play solos and how to interact with the group. This group includes Jaleel Shaw, Nasheet Waits, Dave Holland, and myself. When Jaleel Shaw plays, she does amazing, beautiful lines, and there’s beautiful time; these solos come from a place of perfection. When I solo, I am more interactive and rhythmic, and it also helps elevate the music. As a listener, you appreciate that; you listen to different ways that the solos respond to each other within the form of the piece.

In your album «Diatom Ribbons,» you collaborated with artists like Esperanza Spalding (vocals), J.D. Allen (tenor sax), and Terri Lyne Carrington (drums), receiving praise from The New York Times and winning the NPR Music Jazz Critics Poll for Best Jazz Album. This time, you are joined by the innovative Haitian DJ Val Jeanty and bassist Nick Dunston. How do you manage to fuse free improvisation, spoken word, electronics, and jazz? Additionally, can you tell us about «Diatom Ribbons» and your collaboration with Julian Lage at the Village Vanguard?

The first album was very produced and was a meeting of two different communities with Terri Lyne Carrington, Val Jeanty, and Esperanza Spalding, who I was playing with at that time. I also wanted to bring in the improvised community in New York to see what happens. In the studio, we met, learned the pieces in the moment, and recorded a few takes, and that was it. Regarding the Village Vanguard, it’s more about dealing with the music night after night and recording it after five or six days. We recorded on the last day. It’s always nice to be on tour and then go home and record it so you get the chance to learn the music, see its development, and then capture that in the end. But there’s always something special about meeting for the first time in the studio. The collaboration with Val Jeanty and Terri Lyne Carrington actually happened before Diatom Ribbons, at a concert at the Stone in New York, which was really fun and gave us the appetite to do «Diatom Ribbons.» Due to the fact that the music has a lot of groove, we brought Nick Dunston in because the music needs bass.

Your collaboration with different pianists in two-piano formats, such as with Craig Taborn in «Octopus» or with Angelica Sanchez, is intriguing. How have these collaborations influenced your music and style? Moreover, how did the idea for «Duopoly» arise?

It started with Duopoly which was an album of meetings, and the producer there was David Breskin. We were excited about the particular connection we had musically in the studio. He then suggested making a tour and recording every performance to create an album. Octopus was a consequence of that; we went on tour for two weeks, recording every night, and I then chose my favorite parts from it. The tour was all over the United States.

In light of your latest album titled Run the Gauntlet, which you dedicate to your female pianistic influences, can you tell us a little bit about the meaning behind the title of this album, the intentions behind it, and how it came to fruition?

The title track is one of the pieces from the album. I originally wrote it to navigate a series of challenges. I wrote it for Jonathan Blake because he is so good at playing over vamps and framing them in different ways. I wrote a series of different vamps for him to navigate. While putting the album together, I listened to the way we were interacting and recognized all my influences from Geri Allen, Angelica Sanchez, and Marilyn Crispell—who I saw last night at the Berlin Jazz Festival; they are all in there in some way. I am also doing some work with the Berklee Institute of Jazz and Gender Justice, bringing attention to women composers and players, and I thought it would be a good opportunity to highlight those particular pianists who are really important.

Your compositions include a lot of atonality and freedom in a melodic and harmonic sense. How and when did you start incorporating these elements into your compositions, and how does it relate to the role that visualizations play in your music?

I sort of played classical music as a kid, then got into playing more mainstream jazz and fell in love with Keith Jarrett’s music. When I got to New York, I fell in love with the improvised music scene, which made me question the role of the piano and what I had trained to learn, you know, like, «Is it a comping instrument? Does it have to lay down the harmony, play chords in a certain part of the piano that sound the best?» When I improvised with people freely, all those rules didn’t really apply, so I didn’t want to be the one always controlling the harmony; I wanted other players to also contribute and build the harmony together. This journey led me to explore how I can relate to the instrument not just as a harmonic instrument, but by focusing more on timbral issues or range, bringing more rhythm out of the instrument and putting harmony somehow back. I think that experience of exploring the instrument as an orchestra and looking at contemporary classical music shaped my feelings and ideas about harmony, dissonance, and different approaches to music. Now, when I come back to play more mainstream or groove-based things, or one-chord vamps, where there are more chord changes, I bring in a language that creates these elements of dissonance or unusual ways of approaching foundational harmonic structure.

November 07, 2024

Pin It on Pinterest