Select Page

NICHOLAS PAYTON

Triune – Smoke Sessions Records, 2025

Review

22

September, 2025

Texto: Ricky Lavado

Fotos: Artist’s Concession

REVIEW. In&OutJazz Magazine

Triune (Smoke Sessions Records, 2025). Recorded May 1 & 2, 2025 at Esplanade Studios, New Orleans. Nicholas Payton, trumpet, flugelhorn, piano, Fender Rhodes, Clavinet, vocals, tambourine and handclaps/ Esperanza Spalding, bass and vocals/ Karriem Riggins, drums/ Nikki Glaspie, vocal son “Ultraviolet”/Ivan Neville, vocals, organ and Clavinet on #bamisforthechildren/ Erica Falls, vocal son #bamisforthechildren/ Otis McDonald, vocal son #bamisforthechildren.

Resulta todo un reto intentar condensar en unas frases las múltiples facetas artísticas y creativas de Nicholas Payton. El de Nueva Orleans es trompetista, pianista, vocalista, productor, ensayista y compositor, entre mil otras cosas. Los más de veinte discos que Payton ha publicado como líder, siempre dinamitando categorías musicales y artísticas, le convierten en una de las voces más eclécticas y valiosas en el universo de la música negra estadounidense actual, actuando como puente entre una amplísima variedad de estilos tanto tradicionales como contemporáneos. Nacido en el seno de una familia con larga tradición musical, Nicholas Payton destacó desde la infancia como trompetista, pasando a formar parte de la bulliciosa y rica escena jazzística de Nueva Orleans como miembro de la Young Tuxedo Brass Band con tan sólo nueve años. Posteriormente gozó del padrinazgo del mismísimo Wynton Marsalis, antes de dedicarse a los estudios de trompeta, teoría musical y música clásica en el prestigioso New Orleans Centre for Creative Arts y en la Universidad de Nueva Orleans. Es largo el listado de figuras fundamentales del jazz moderno con las que Payton ha compartido escenario y proyectos (de Clark Terry o Marcus Roberts, pasando por Elvin Jones o Doc Cheatam), y para su última entrega discográfica, el completísimo y refrescante Triune, la elección de sus compañeros de viaje quita el aliento: la bajista Esperanza Spalding y el batería Kariem Riggins.

 

En palabras del propio Nicholas Payton, “Triune significa ‘tres en uno’, y así es exactamente cómo funciona este trío; cada uno de nosotros es un líder por derecho propio, pero juntos nos unimos para formar un sonido unificado”. La unión entre Payton, Spalding y Riggins se remonta a 2010, en un cuarteto del que también formaba parte Taylor Eigsti. Por aquel entonces Esperanza Spalding ya había construido una sólida carrera como instrumentista fundamental en las nuevas generaciones de jazz contemporáneo y otras expresiones de la música negra actual. Más tarde vendría su premio Grammy a la mejor artista revelación (primera artista de jazz en ganar dicho reconocimiento). Por su lado, Riggins lleva décadas siendo una pieza fundamental en el jazz norteamericano reciente, aunque su nombre está escrito en letras de oro dentro del universo del Hip Hop, como productor, beatmaker, DJ y escudero de lujo de nombres fundamentales como JDilla, Common, Kanye West, Erykah Badu o Madlib.

Triune representa, pues, la suma de tres mentalidades extremadamente creativas que entienden el jazz no como una formulación artística estática, sino como un arte en continua evolución que dialoga con múltiples géneros, sonidos, estéticas y corrientes musicales en cada momento histórico. Para añadirle eclecticismo y dinamismo, se suman a la fiesta, además, Nikki Glaspie, Ivan Neville, Erica Falls y Otis McDonald como voces invitadas. Los ocho minutos de “Unconditional Love”, la pieza que abre Triune, marcan el carácter general del álbum; Triune no está pensado para ser escuchado con prisa, aquí el groove crece de forma paciente, y requiere de atención para ser disfrutado en profundidad. Todo en este disco camina con el peso de la tradición negra, del gospel al jazz moderno pasando por el funk o el Hip Hop; como en la incendiaria y urgente “Feed the Fire”, en la que la voz cálida y suave de Esperanza Spalding brilla con tonos R&B sobre la maestría de Kariem Riggins en los terrenos del Rap; o en la misteriosa y adictiva “Gold Dust Black Magic”, con sus polirritmos electrizantes y su carácter ancestral. Cada composición de Triune suena sólida, densa, profunda; cada arreglo brilla por derecho propio, cada ritmo te invita al movimiento. “Jazz is a four letter word” funciona como clase maestra de jazz contemporáneo cargado de funk aventurero y experimental, con un Nicholas Payton en estado de gracia; mientras que “#bamisforthechildren”, pieza que cierra el álbum con guiño a Wu Tang Clan incluido, nos lleva de cabeza a Nueva Orleans en forma de ritual colectivo que celebra los conceptos de tradición y comunidad.

Más que un disco de jazz, Triune es un trabajo brillante y poderoso que utiliza el jazz como medio o herramienta para construir un conjunto de canciones que no sólo beben del amplio árbol genealógico de la música negra norteamericana #bam, sino que lo enriquece con el talento y la clase de tres representantes de la mejor formulación actual de dicha tradición cultural. Una maravilla.

September 22nd, 2025

Pin It on Pinterest

Share This